Una invitación a este Estado de Pura Consciencia

La esencia de nuestro trabajo aquí es la Consciencia, que es también conocida como el Ser, la Realidad del Yo Soy, el Amor, la Vida, lo Divino, Dios. Es solamente eso lo que usted necesita constatar. Al final, ¿qué es Eso en usted que es consciente de este momento? Es algo siempre presente y consciente. Eso es lo que estamos investigando juntos.

El pensamiento que usted tiene de sí mismo es de limitación, porque usted piensa en sí mismo como siendo el cuerpo y la mente. Usted no se puede imaginar a sí mismo como esa ilimitada Consciencia, algo más allá del tiempo y el espacio y, naturalmente, más allá del cuerpo y la mente. La mente no alcanza esa Realidad, no puede ni siquiera imaginarla. Por tanto, usted no está preparado para Eso.

Satsang es un espacio muy interesante, porque en él usted tiene que enfrentar la posibilidad de verse más allá del cuerpo y la mente. Aquí, la cuestión es romper con ese paradigma de limitación que la mente se impone a sí misma. En realidad, esto es una hazaña imposible para la mente, porque las consideraciones que esta tiene de la vida se basan en su propia experiencia, que es de tiempo y espacio. Entonces, la mente no puede visualizer ni considerar que exista algo fuera del tiempo y del espacio. Esto para la mente es muy duro, muy difícil.

Toda creencia se basa en la experiencia imaginaria de la mente, la cual requiere materia, imágenes. ¡Perciban lo importante que es esto! Eso está fuera de toda experiencia, fuera de toda imaginación y, por tanto, fuera del alcance de la mente. Así que, en general, las personas no están preparadas para Eso. Las personas necesitan un toque misterioso, algo más allá de la mente, y ese toque es la posibilidad de un vislumbre de la Meditación.

La mente ama las aventuras, pero dentro de lo conocido, algo con lo que pueda lidiar, imaginar. La invitación en Satsang es para este Estado de pura Consciencia, donde no hay nada físico ni material, nada de imágenes, solo Consciencia. Es un Estado desconocido para la mente, al cual llamo “Inteligencia”, es el Verdadero Estado Natural de Inteligencia. No hay Inteligencia en la mente, porque esta trata con lo conocido, con lo imaginario, esta cuida del tiempo. La mente es el tiempo y este Estado está fuera del tiempo, fuera de lo conocido. Esto a usted le puede sonar increíble, porque todo lo que la mente hace se mueve en el tiempo. Los cinco sentidos están en el tiempo… o los seis sentidos (algunos consideran a la mente como un sentido más). Por lo tanto, los sentidos no son prueba de la Realidad, sino de la experiencia.

Aquí, estamos hablando de la Consciencia, de Algo anterior a eso. El espacio físico es medido en tiempo, es decir, de un objeto a otro hay una distancia, y eso es tiempo. Ese espacio físico está lleno de objetos separados, perceptibles para los sentidos, y eso está siempre siendo percibido en la mente. Hay algo en usted que está más allá de la mente, por ende, más allá de la experiencia, más allá de esos objetos, de toda esa multiplicidad de apariciones. Consciencia es todo lo que existe, es todo lo que hay, no hay nada fuera de Ella. Entonces, la mente, que es donde esos objetos aparecen, está dentro de esa Consciencia.

Pregúntese a sí mismo: ¿qué es el tiempo? Toda la noción de tiempo está siempre ligada al movimiento de la memoria. La memoria habla del tiempo, relata su existencia. Sin memoria, no hay tiempo. La noción de espacio es la distancia entre un objeto y otro, y esa medición solo es posible en el tiempo. Todo esto son experiencias en la mente, experiencias del conocimiento. Sin conocimiento, sin memoria, sin medición, no existe noción de espacio; sin objetos, no hay noción de espacio ni de tiempo; sin memoria ni conocimiento, no hay noción de objetos, y todo eso es parte de la mente. Entonces, ¿qué es el tiempo? Es solo imaginación, un movimiento de imágenes, un espacio entre imágenes. ¿No es así?

¿Usted cómo sabe si pasaron 30 minutos o una hora sin el objeto de medición del tiempo, que es el conocimiento basado en el cambio de los punteros de ese objeto, que es llamado reloj? Entonces, el conocimiento es necesario para la noción del tiempo, y el pensamiento es necesario para la noción de objeto. Siendo así, ¿qué es el tiempo? ¿Qué es el espacio? ¡Esta cuestión es muy radical! En realidad, esta noción de atemporalidad, de la Realidad fuera del tiempo y el espacio, fuera de la materia, de la percepción, no es algo nuevo, pues toda tradición religiosa de la historia humana ha tratado esto. Buda, Jesús, todos los sabios de todos los tiempos hablaron de ese eterno Ahora, de esa Realidad, que es la Consciencia.

Estar ahí es perfección absoluta, es omnisciencia, ¡es inmortalidad! La Consciencia es Aquello que hace todo perfecto, todo completo, todo libre de limitación, ¡y Usted es Eso ahora! Usted es esa inmortalidad atemporal, esa perfección atemporal, lo Divino, la Verdad, ¡Dios! Ese descubrimiento está en la constatación de su Estado Natural, que es Meditación. Así, Eso ya no son solo palabras, sino una constatación directa de lo que algunos llaman “Realización”, “Iluminación”. Es sobre eso que tratamos en Satsang.

Esa Realidad atemporal, que es pura Consciencia, es la ausencia de la ilusión de separación. Usted realmente es puro, es libre, es la Verdad en este mismo instante. Su Vida es libre, es atemporal. Entonces, ¡su Ser es inmutable! Oír todo esto es muy extraño, porque usted, durante toda su vida, ha buscado mejorar, perfeccionarse, querer ser diferente de lo que es. Así, usted se ve dentro de una limitación y, por tanto, con la posibilidad de entrar en un proceso de mejora, de crecimiento, de perfeccionamiento. Usted quiere ser diferente de lo que es, y yo estoy diciendo otra cosa aquí. Estoy diciendo que eso no es necesario, que eso es solamente imaginación, una creencia, algo aprendido. Además de no ser necesario, no es posible, porque Lo que Usted Es, ¡es inmutable! Es esa Realidad atemporal, es Eso que ya está listo, su Ser inmutable, pura Consciencia, infalible, ilimitada, indescriptible, Inteligencia Absoluta.

Eso puede sonar muy abstracto y profundo, pero nada es tan simple y singular. La Realidad de su Ser es la manifestación de ese Estado Natural, que es Meditación, y nada es tan simple como Eso. Entonces, por favor, sea paciente, relájese, obsérvese interiormente y vaya más allá del cuerpo y de la mente, vaya al Corazón, a ese Espacio atemporal, a ese “no espacio”, a ese “lugar no localizable”. ¡Muévase hacia el “no movimiento”!

Hasta ahora usted siempre se movió horizontalmente en el mundo de las ideas, de las creencias, de los pensamientos, de las imágenes, de los proyectos, deseos, sueños, o sea, siempre fue un movimiento de experimentar, de percibir, de sentir. Ahora, la invitación es a Aquello que está fuera de la mente, de lo conocido. ¿Perciben la belleza de eso?

Entonces, aquí la invitación es a su Estado Natural, ¡que es Meditación! Esa es la Verdad suprema, la infinita Realidad. ¡No existe nada más allá de la Consciencia! ¡La Consciencia es su única Realidad! Entonces, todo eso que usted considera “el mundo”, aparte de esa Realidad, ¡es una ilusión! Esa Consciencia es infinita, sin límites, sin márgenes, sin descripción. Eso que se vuelve tan obvio para el sabio es en realidad un gran choque para todo ese proceso cognitivo de la mente. La humanidad ha perdido Eso, porque se identifica con el cuerpo. La persona vive en esa identificación con el cuerpo, y lo que recibe el nombre de “persona” es solo una proyección, un conjunto de creencias, una ilusión.

Transcrito a partir de un discurso en un encuentro online llevado a cabo la noche del 11 de septiembre de 2019. Publicado en portugués por primera vez el 22 de enero de 2020. Para más información sobre nuestras reuniones, haga clic aquí.

Usted necesita estar dispuesto a esto

Cuando usted acude a esta invitación llamada “Satsang”, necesita estar dispuesto a esto, de otra forma no va a suceder nada. Lo que yo he percibido es que pocos se logran aventurar, pocos se ofrecen de verdad, hay muy poca disposición para esto. Estoy hablando de ruptura, de quiebra… Es esencial aceptar la posibilidad de la quiebra, la posibilidad de que surja algo nuevo. Entonces, esta es una invitación muy desafiadora. Usted necesita tener esa disposición y, si la tiene, tal vez usted sea uno en un millón.

¿De qué estoy hablando? Lo que estoy diciendo es que usted tiene a lo Desconocido en frente suyo, pero atrás tiene el pasado. Al no haber esta quiebra, el pasado se vuelve su presente, y la continuidad se mantiene. Es como caminar en un círculo. Por más que usted camine, permanecerá dentro de él.

Parece que la gran mayoría de personas aún no entendió esto. Las personas escuchan hablar a respecto de la Realización, de un Estado libre de tiempo, libre de experimentador, libre de un “yo” con sus conflictos, dilemas, problemas, pero las personas no están dispuestas a ir más allá del círculo, más allá del pasado. Realización, Autodescubrimiento, Iluminación (o cualquier término que se use), no tendrá ningún sentido para su vida en cuanto usted se mantenga en ese modelo.

Usé la palabra “quiebra”… Es necesario que se quiebre su pasado, que lo que fue se rompa, para que no haya esa continuidad. Ese es el verdadero sentido de la Realización de Dios, de la Iluminación: el rompimiento con lo antiguo, con aquello que usted tiene atrás, con lo que fue, con la historia. Es necesario que usted esté dispuesto a eso, que se aventure, que acoja ese desafío de romper con el antiguo “yo”, con esa forma de pensar, sentir y actuar totalmente asentada en creencias, en decisiones, en deseos.

Hasta ahora, sus acciones se han basado en el miedo, y ha sido así porque no hay esta ruptura con el pasado, usted no acepta ir más allá de ese falso “yo”, de todo el contenido de ese falso “yo”. Entonces, usted no toca lo Desconocido. Hace poco dije: “Está el pasado atrás y lo Desconocido enfrente”. Repare que no usé la palabra “futuro”, sino “Desconocido”. Lo que está enfrente es solo lo Desconocido. Todo su pasado se ha transformado en su presente, el cual, a su vez, se ha vuelto su futuro. Pero en realidad, su futuro continúa siendo su pasado, porque aún es solamente la continuidad. La Iluminación es el rompimiento con eso.

Si usted está aquí, nació para Descubrir Esto. ¿Qué está haciendo? ¿Adónde se dirige? Obsérvese… ¡Usted no sale del círculo! Todo se repite, y siempre está sucediendo lo mismo, porque usted no ha acogido la Verdad, no está dispuesto a abrazarla, no está dispuesto a Nacer. Usted cree que ya nació, pero no carga un nuevo Nacimiento, carga un viejo pasado. ¡Eso significa que usted no nació! Es por esto que Cristo un día dijo que es necesario nacer de nuevo. Pero, este no es solamente el mensaje de Cristo, es el mensaje del Sabio, del jnani, de aquel que está libre del tiempo.

Cuando usted se aventura a lo Desconocido, ocurre un real y nuevo Nacimiento. Cuando usted Nace, muere, su pasado se rompe, se quiebra. ¡Ese es el Nacimiento de la Verdad! No es la persona que nace; es el surgimiento de lo Nuevo, es marinar en lo Desconocido. Esto es la Realización de Dios, ¡la Verdadera Iluminación! Pero si usted continúa con el pasado cubriéndolo con algo nuevo, eso es tan solo una falsificación. ¡El conocimiento es esa falsificación! Hablo del conocimiento espiritual, advaita, de la experiencia mística, la que viene de la práctica de meditación. Después de cierto tiempo, usted se vuelve un experto en eso, alguien capaz de “alejar” la mente, los sentimientos, las emociones, las sensaciones, las percepciones, y sumergirse en sí mismo. Sin embargo, ese “sí mismo” aún refleja algo del pasado. Aún está ahí, sutilmente, casi invisible a los ojos comunes, pero está ahí.

Lo que quiero decir con esto es que usted no necesita de experiencias místicas, no necesita de prácticas de meditación, ni de un conocimiento especializado sobre la Iluminación. ¡Usted no necesita saber nada sobre esto! Todo eso, en realidad, es bastante peligroso, porque es la posibilidad de una cobertura sobre el velo. Si usted es un Sabio, no necesita conocimiento, no necesita experiencias místicas, no necesita ser un experto en meditación. ¡Usted es un Sabio! ¡El Sabio es aquel que nació de nuevo! Que tuvo el coraje de romper con el pasado y marinar en lo Desconocido.

Entonces, lo Desconocido es como el mar ante usted. Usted puede quedarse aquí parado en la playa sin aventurarse. Puede continuar parado en esa piedra, ver todo el mar ante usted y mantenerse seguro. Esa piedra es su pasado. Esa playa es su historia. Esa es la continuidad de ese falso “yo”. Entonces, cuando usted viene a Satsang, yo le digo: “Es hora de aceptar que es posible morir”. Primero, dije que usted necesita nacer de nuevo, y ahora, estoy diciendo que usted necesita “morir”, porque usted solo puede Nacer, si “muere”.

Acoger la Verdad es abandonar la ilusión. La ilusión es toda su vida, su historia, lo que usted conoce de sí mismo. Por eso, mi énfasis está siempre en la cuestión de la Meditación Real, la cual no viene de una práctica, no es el resultado de una experiencia mística, ni es algo que se pueda aprender. La Meditación es el Despertar, es el florecimiento de lo que está aquí y ahora, dentro de usted. Entonces, cuando hablo de lo Desconocido que está ante usted, ese “ante usted”, en realidad, está dentro. Pero no haga como aquellos que creen que cerrando los ojos pueden ir hacia dentro. ¡Para nada! Ir hacia dentro no significa cerrar los ojos, sino aceptar la quiebra de lo conocido, del pasado, de ese “yo”. Estoy diciendo que ese “yo” es falso y está asentado sobre una base totalmente falsa. El deseo es parte de esa estructura, el miedo es parte de esa estructura, el conocimiento es parte de esa estructura.

Entonces, cuando yo lo invito a mirar hacia dentro, estoy diciendo, en otras palabras: “¡Salte a este mar! ¡Suelte la playa! Deje la playa, ¡salga de esa piedra y camine hacia el mar!”. Yo vengo hablando de esto hace algún tiempo, pero lo que he percibido es que las personas no están dispuestas a esto, es como si fuera demasiado para ellos. Ellos quieren solo pellizcar la Felicidad, quieren sentir el sabor con tan solo tocar, entonces, se alejan enseguida, porque perciben el peligro. No puede haber Felicidad, Amor, Paz, en cuanto “usted” esté ahí, sobre esa piedra, en la arena, mirando el mar. Ese no es el lugar.

Transcrito a partir de un discurso en un encuentro en el Ramanashram Gualberto en la ciudad de Campos do Jordão – SP, el 01 de abril de 2018. – Publicado por primera vez en portugués el 16 de enero de 2020 . Para más información sobre nuestras reuniones, haga clic aquí.

La visión clara de esto es la Iluminación

La palabra “investigación” nos recuerda a averiguación, una forma de aproximarnos a algo a través de una búsqueda, de una observación. ¡Perciba lo importante que es observar! En Satsang, estamos haciendo una investigación de nosotros mismos, o una autoinvestigación. Es difícil para usted aceptar, al principio, la naturaleza ilusoria del mundo o de sus experiencias, una vez que estas son muy íntimas, particulares, personales, y son todo lo que usted tiene.

Entonces, cuando usted se depara con un Ser realizado, no puede esperar que Él le diga las cosas que usted está acostumbrado a oír. Su percepción del mundo no es como la percepción del Sabio. Usted percibe el mundo como algo externo, pero para el Sabio no es así. Para Él, la percepción del mundo sucede espontáneamente en el Ser, en esta Consciencia, y usted solo puede ver esto a través de la autoinvestigación. No se puede comprender la naturaleza ilusoria del mundo sin comprender la naturaleza ilusoria del “yo”, de la “persona”.

¡Usted es la realidad del mundo! ¡No existe mundo sin esa Realidad que es Usted! Su Naturaleza Verdadera es esa en la que el mundo surge, donde la vida aparece. Usted no es una persona, no es un individuo, pero se olvidó de eso. Solo la autoinvestigación puede surgir como una luz para traer este recuerdo, para que esto vuelva, para que esté ahí nuevamente. Es muy paradójico, porque esto nunca estuvo lejos, ni fue realmente olvidado, pero así parece que sucedió.

Estoy hablando de la Realidad de nuestra Naturaleza esencial. El mundo no es externo, la vida no es externa, mundo y vida son una forma de percepción, y Usted es esa Consciencia, esa Realidad, esa Presencia en la que esa percepción surge. Su cuerpo-mente es como un mecanismo electrónico – si la energía eléctrica circula, este funciona. Pero si la energía no circula, aún estando en perfecto estado y con el interruptor conectado, el mecanismo no funciona.

Así, lo que usted llama “percepción del mundo” es solo un proceso que sucede en ese “mecanismo” [cuerpo-mente]. Esa Energía llamada Consciencia, Presencia, es como la energía eléctrica en el mecanismo electrónico – si esa Energía no está ahí, el mecanismo no funciona. Así, lo que usted llama “mundo” es solo una percepción de esa Consciencia en ese mecanismo. Lo que usted llama “vida” es solo un movimiento aconteciendo para este mecanismo. ¡Perciba cómo es importante investigar esto! No hay ninguna realidad en este mecanismo en particular, porque él es parte de toda la experiencia del mundo o de la vida.

La Realidad está en esta Energía, en esta Presencia o Consciencia. ¡La única Realidad es esta Consciencia! Todo lo demás es un juego de luz y sombra, apariciones fenoménicas bastante superficiales. Usted da mucha importancia a su historia personal, pero no existe tal historia personal, porque no hay “persona”, no hay “individuo”, no hay “entidad”, no hay “alguien” ahí; es solo el mecanismo. Yo sé que eso es muy frustrante, porque usted nunca se volverá un ser espiritual evolucionado, diferente de los demás, pues no existen “los demás”, así como no existe “usted”. Solo hay esta Energía, esta Consciencia, esta Presencia, que llamaremos Dios, la única Realidad.

La única Vida Real que anima ese cuerpo, esa mente, es Eso que trasciende los sentidos, el propio cuerpo, la mente, en fin, ¡trasciende todo! Ese Poder Único es esa Consciencia. Solo ese Poder está presente. ¡Usted no es quien cree ser! El Silencio, la Verdad, la Consciencia es ese Poder, esa “Electricidad” que hace todos los mecanismos funcionar. En realidad, esos mecanismos son solo ideas, no tienen realidad fuera de este Poder, de esta Consciencia. Este gran Poder, mágicamente, une las células femenina y masculina y entonces aparece ese mecanismo llamado “cuerpo humano”. Esto es solo una aparición mágica de ese único Poder.

Yo ya le he dicho esto, en estos encuentros: el mundo no tiene más realidad que lo que usted sueña en la noche. Su estado de vigilia no es más real que su estado de sueño, no es mayor ni en significado, ni en importancia. ¡Ambos tienen exactamente la misma cualidad! Nada de lo que sucede en su estado de vigilia es más importante que lo que sucede en su estado de sueño. ¡Es todo igual!

Lo que estoy diciendo es que su cuerpo está “muerto”. Todo lo que usted ve a su alrededor está “muerto”. La única Vida es esta Presencia, este Poder. ¡Así que todas sus preocupaciones son completamente inútiles! ¡Todo lo que tiene que ocurrir, ocurrirá! ¡Todo lo que no tiene que ocurrir, no ocurrirá! Toda esa confusión en su cabeza es solo un juego en el que usted quiere participar, pero no le pertenece. Este juego le causa aflicción porque usted quiere ganar, pero es un juego que no es suyo, una vida que no es suya, una historia que no es suya, un nacer, un vivir y un morir que no son suyos.

La visión clara de esto es la Iluminación, la Autorrealización, la visión del Sabio, ¡de la Verdad! Entonces, si usted descubre esto en sí mismo, todos sus problemas desaparecen, porque estos solo están presentes cuando “usted” está presente. Es en esa idea de que Usted está ahí que yace el problema. Entonces, ¡tenga coraje! Diga esto: ¡nada es real! Diga conmigo: ¡nada es verdad! ¡No hay verdad!

Mi Maestro me mostró Esto, esta Verdad. Solo la fe en el Maestro le permite ver. ¡El arma más importante que usted tiene es la fe en el Maestro! El mundo es solo un pensamiento, la vida es solo un pensamiento, al igual que sus conflictos, problemas, dilemas, deseos y miedos. El despertar del Gurú interno, del Maestro interno, de la Presencia, de la Verdad, sucede cuando usted descubre lo que es vivir en Sí mismo, en su Verdadera Naturaleza, en su Ser. En la visión de un Ser Realizado, Aquel que está asentado en su Naturaleza Real, nada está separado del Ser, de la Consciencia.

No importa si lo que usted tiene en su dedo es un anillo o si lo que su esposa tiene en las orejas son aretes. Si estos objetos son de oro, esta es su naturaleza. La forma que ellos tienen ahora no tiene importancia, pues los aretes y el anillo pueden derretirse, pero el oro permanece. Estos pueden tomar otra forma, pero el oro sigue siendo oro. Asimismo, la Naturaleza de la Realidad es Dios. ¡Esta Naturaleza es todo lo que hay! ¡Esta Realidad es todo lo que hay! Este objeto que usted llama “vida humana” no tiene importancia. ¡Esta es la visión de un ser Realizado! Donde Él está viendo oro, usted está viendo el anillo, el arete. Mientras que usted se preocupa con las formas y los nombres, el Sabio está viendo la naturaleza esencial de las apariciones.

Lo que estoy diciendo es que la mente no es la causa del mundo; que las formas, los nombres y las apariciones no son la base del mundo. La base del mundo, de la vida, es algo que trasciende las formas, el mundo, la vida. Su problema fundamental es la ilusión de que “usted” está ahí, controlando, haciendo, resolviendo, decidiendo, ocupándose, preocupándose… No hay rendición, entrega, confianza en esa Realidad que sustenta toda la existencia. Entonces usted mantiene en apuros, con problemas. La Verdad final es que nada sucede o está sucediendo, es decir, nada es verdadero. La Verdad final es que no existe final, ni inicio. Usted piensa en términos de eventos ocurriendo en el tiempo: hace 50 años, hace 100 años, o hace dos horas, pero esto es solo imaginación. No existe tal cosa como “el tiempo en que la cosas ocurrieron” o “ el tiempo en que las cosas ocurrirán”.

Hace poco dije: “Lo que tenga que ocurrir, ocurrirá, y lo que no tenga que ocurrir, no ocurrirá”. Sin embargo, no estoy diciendo absolutamente nada con estas frases, porque de hecho, nada está ocurriendo, ni ocurrió, ni ocurrirá. Todo lo que hay es esta Energía moviéndose o generando movimiento, y esto es solo un juego dentro de esta llamada “percepción particular” que usted cree tener. En realidad, esto también es solamente una ficción, una imaginación. No piense sobre esto, permanezca sin pensar y esta será la suma total de la Realidad. Todo pensamiento es un fraude, toda idea es solo imaginación que pasa, una imagen en movimiento. Así, lo que usted llama “mente” es solo una fábrica de ilusiones.

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El indescriptible Océano de Pura Felicidad.

¿Cómo mirar, oír, sentir?, ¿cómo pensar?, ¿cómo lidiar con lo que se presenta? Lo que hacemos en estos encuentros es descubrir cómo salir de ese modelo, el antiguo modelo personal. A través de conclusiones, usted siempre está limitado a la percepción de lo que es. Lo que es, es muy vasto, amplio, profundo, pero usted asume una conclusión sobre eso, sobre la situación, circunstancia o evento. Entonces, se coloca en una limitación, porque su óptica, su visión, es completamente personal.

Esto explica la infelicidad. Por ejemplo, todo lo que nace, muere. Pero, ¿quién acepta la muerte? Todos los seres sintientes, todos los seres vivos, todo lo que tiene vida biológica muere (digo “vida biológica” porque, tal vez, usted no acepte que todo es la Vida expresándose). Todo lo que está vivo crece, envejece y muere. Sin embargo, la naturaleza es muy caprichosa y, a veces, antes de envejecer, un ser vivo sufre un accidente y muere. No siempre el ciclo se completa.

Pero, ¿sabe lo que sucede? Su mente está entrenada para no acoger lo que es. Entonces usted no acepta la enfermedad, no acepta el accidente, no acepta la vejez ni la muerte. Yo solo le estoy dando un ejemplo de cómo usted se comporta cuando piensa, decide y elabora conclusiones sobre cómo la Vida es. Pero la vida no es como la mente concluye y desea. La mente tiene una imagen de permanencia, de seguridad, de control, pero la Vida es real, no está en lo imaginario. La Vida está en el misterio, en lo desconocido, y no busca satisfacer a nadie, porque para la Vida no hay nadie.

Entonces, si se me permitiera darle un consejo, sería: ¡deje las cosas como están!, ¡no se meta en los asuntos divinos!, ¡todos son asuntos de Dios!, ¡la Vida es el asunto de Dios! Así que no se aferre a conclusiones, no se enamore de objetos. Enamórese solo de la Vida, de la manifestación de la Vida, no de los objetos en los que la Vida se manifiesta. Reparen que hay una diferencia. El Sabio está en Amor con la Vida, pero no está preso a los objetos en los que la Vida se manifiesta.

Porque la Vida es ese movimiento misterioso, Ella se manifiesta en un objeto, pero después lo deja y permanece en otro. Entonces, usted dice que el primer objeto murió y el segundo está vivo. Eso también es solo una conclusión. La Vida se está manifestando de otra forma, pero usted está viviendo en la mente, entonces, se enamora de los objetos. Usted le llama a eso Amor, pero es sufrimiento, ilusión, no hay Verdad en eso.

Entonces, ¡suelte todo eso! Esto solo es posible cuando se está sin conclusiones, sin ideas sobre lo que está bien y está mal, sin ese “esto me gusta”, “esto no me gusta”. Usted no necesita nada de tiempo para esa libertad. Usted tiene un insight… ¿Saben qué es un insight? En el Zen, se le llama Satori. Es cuando estoy diciendo algo aquí y usted siente, sabe, percibe y dice “¡yo sé de qué está hablando!”. No es una comprensión intelectual, eso no sirve de nada. Un insight es una percepción directa. Si usted trabaja arreglando relojes o carros, necesita entender intelectualmente cómo funciona el mecanismo de un reloj o la mecánica de un automóvil. La comprensión intelectual es importante en algunas áreas, pero en lo que respecta a la consciencia solo la intuición es necesaria. Uso con mucho cuidado la palabra “intuición”, porque no estoy hablando de lo que los místicos y esotéricos llaman intuición. Intuición es Satori, es ese insight, es esa percepción fuera de la mente. Esa Consciencia de la Realidad acerca de lo que está aquí y ahora.

Entonces, cuando usted sabe de qué estoy tratando aquí, no sentimentalmente o intelectualmente, en la imaginación, sino en el Silencio, en el puro Silencio de esa Percepción no verbal, eso es Satori. Así, algo ahí dentro dice “¡ah!”, pero usted está fuera de la mente, de las conclusiones, de la imaginación, de las ideas. Por lo tanto, el punto aquí siempre es este: ¡permanezca en su Ser!, ¡permanezca fuera de la mente!, ¡no dé espacio para ese modelo de pensamiento que se repite! De esta forma, usted está siempre aquí y ahora, nuevo, fresco, original, sin historia. Eso es estar fuera del relato, fuera de la descripción. Historia es descripción. La Vida no carga historia. La historia es una cosa muerta, es una descripción de un suceso en el pasado. Aquí, en este instante, en este presente momento, no hay historia. ¡Nunca hay historia!

Las personas hablan de amor eterno, pero frases como esa son completamente absurdas. Si es Amor, no es eterno y, si es eterno, no es amor. Somos socialmente criados para la mediocridad. Entonces, en la mente, usted está reproduciendo la cultura de la mentira, de la ilusión. Llamamos “amor eterno” el extrañar a alguien, y a la falta, a la carencia, la llamamos “amor”. Cuando hay Amor, solo hay Amor, no hay objetos y, como no hay imágenes, no hay historia. Entonces, como no hay tiempo, no puede ser eterno o no eterno. El Amor es atemporal, no está aferrado a objetos, ni a imágenes y formas. E Amor no tiene ninguna relación con historias y no se puede describir.

Aquí tenemos tan solo una “cosa” – ¡Aquello que es indescriptible, innominable, sin historia! ¡Eso es Meditación! ¡Entonces no haga nada más! ¡Permanezca en Silencio! Permanezca desidentificado de formas, nombres, imágenes, pensamientos. Eso es Samadhi, el Estado Natural. Así, se pueden oír los pájaros, porque ningún pensamiento interrumpe sus cantos. Ellos cantan cuando no hay pensamientos, imágenes, historia. Cuando no hay objetos capturando su atención mientras los pájaros cantan, ellos no están allá fuera ni ahí dentro; ellos solo cantan… ¡El dentro y el fuera desaparecen! ¡Eso es Meditación! “Usted” no está y, cuando “usted” no está, Buda está, Cristo está. Ahora, olvide la palabra “Buda”, la palabra “Cristo”, la palabra “Dios”, la expresión “Puro Ser”. ¡Olvídelo todo! ¡Permanezca ahí!

Ahora usted sabe de qué estoy hablando y, cuando sabe de qué estoy hablando, ya no hay más “alguien” hablando, ya no hay más Maestro, ya no hay más discípulo. ¡Esa es la Verdad! Tampoco existe Buda y, si lo encuentra, ¡usted “le corta la cabeza”! Acabamos de hacer eso. “Cortar la cabeza del Buda” es estar aquí en la Verdad Última, donde usted sabe que no existe Maestro ni discípulo; que no existe dentro y fuera, sabiduría o ignorancia, ilusión o verdad. Todo está en su lugar, ¡absolutamente todo está en su lugar! Eso es Felicidad, cuando no se espera nada más, no se busca nada más, no hay más deseo, miedo, pasado, futuro. El futuro viene con el deseo, y el pasado viene con la historia. Lo que fue no es, lo que es no fue, lo que es no será, lo que será no es, ¡y aquí está todo!

Las personas quieren una práctica, pero yo no recomiendo prácticas. Mi recomendación es: ¡desista!, ¡pare! Vean lo simple que es esto. Usted está muy acostumbrado a moverse… Y no lo hace solo físicamente, lo hace más que todo psicológicamente. Entonces, aunque el cuerpo esté parado, usted está con su familia. ¡Pero no hay familia aquí! Usted “se mueve” hacia su hijo, hacia sus padres… Yo estoy diciendo: ¡pare!, ¡permanezca aquí!, sin familia, sin sonido interno. Así, usted puede oír el pájaro, puede oír esta voz, que usted sabe que no está viniendo de afuera ni de dentro, pues dentro y fuera desaparecieron. La voz no interrumpe el Silencio, así como el pájaro cantando. Esto es porque la voz es el Silencio, el canto del pájaro es el Silencio, ¡Usted es el Silencio!

En algunos momentos de su vida, usted “vislumbró” la Felicidad, tuvo un pequeño vislumbre del indescriptible Océano de pura Felicidad. No consiguió aprofundar, fue solo un pequeño vislumbre. En esos momentos, “usted” desapareció, no estaba ahí. Después la mente volvió y dijo: “¿Qué fue eso?”. No había medidas para esa alegría, completitud, libertad… Entonces, usted fue buscando adjetivos. Estoy diciendo que usted apenas “vislumbró” la Felicidad, y solo pudo hacerlo cuando no estaba presente.

Samadhi es estar sumergido en ese Océano de Bienaventuranza y Felicidad, y no solo haber tenido un breve “vislumbre”. ¡Samadhi es haber desaparecido! Es como la gota que cae en el océano y ya no se logra distinguir qué es océano y qué es gota. Ese es el sentido de la existencia – ¡Samadhi, Beatitud Suprema, Bienaventuranza Suprema! Esto está presente cuando usted no lo está, cuando sus ojos son los ojos de Dios. ¿Sabe cómo ve Dios? Así como Usted ve cuando “usted” no está. Usted encuentra esta visión cuando, de repente, ve un bebé. En tiempo de reloj, dura unos dos segundos. Son dos segundos en los que usted no está aprisionado, porque “usted” no está. En ese instante, usted no es prisionero del tiempo. Usted está en el Amor atemporal y no hay mediocridad, limitación. ¡En su Ser no hay limitación! ¡Usted es Dios todo el tiempo!

Entonces, ¡ríndase!, ¡ríndase! ¡Dios es la única Realidad en su Ser! ¡Eso es Dios! El corazón palpita, el pájaro canta y usted oye el sonido. No se preocupe por su vida, porque no existe “su vida”. ¡”Su vida” es la Vida de Dios! Solo hay Dios en todo lugar, ¡en todo! Esa comprensión es Samadhi. Mi comprensión sobre la Vida es que Usted es Dios. ¡Yo solo veo Dios! No luche con sus pensamientos, con sus emociones, sentimientos, percepciones. ¡No luche! Viva solamente en esa desidentificación. ¡Es tan simple! ¿Por qué lo vuelve tan difícil?, ¿por qué vive en sus apegos? ¡Su Amor es Dios! Yo decidí vivir solamente en ese Amor. Mi Gurú me mostró ese Amor.

¿Cuál es su verdadera necesidad? Si su corazón está lleno de Dios, no hay necesidades, porque no hay miedo, deseo, conflicto y apego. ¿Entiende eso? Si lo que quiere es ser libre, ¡sea libre!, ¡justo aquí y ahora! ¡Este es un océano de Felicidad! ¡Este bello Océano está abierto para usted! Mi gurú me mostró lo que es la Meditación Real. ¡La Meditación es la llave!, ¡la llave maestra! ¡Con esa llave se abren todas la puertas! Esta llave abrirá la puerta de la Sabiduría, la puerta de la Inteligencia, la puerta del Amor, la puerta del Silencio, la puerta de la Felicidad. Una única llave es suficiente y, entonces, Usted está en el Cielo. Y no me refiero a un cielo en oposición al infierno. Hablo de un cielo sin opuestos – el Reino de Dios, y Eso está dentro de Usted. Entonces, todo lo que usted necesita decir es: “¡Dios Amado, mi vida es suya!”

Transcripción de un discurso realizado en un encuentro presencial en la ciudad de Campos do Jordão, el 31 de marzo de 2018 – publicado por primera vez en portugués el 8 de enero de 2020. Para más información sobre nuestras reuniones, haga clic aquí.

No hay nada y nadie allá afuera

En general, el ser humano vive una vida muy superficial y con una necesidad interna, que es una ansia por la Paz. Esta es una puerta interna, pero que parece oculta para la gran mayoría de las personas, puesto que sus intereses son muy superficiales. Nuestra educación, nuestra formación, desde la infancia, está orientada hacia lo exterior, hacia la vida de “ganar el pan”: estudiar, formarse, trabajar, constituir una familia… Y los hijos siguen este mismo formato. Nosotros morimos, pero dejamos a nuestros hijos siguiendo el mismo modelo.

Esta necesidad interna de Paz, de Consciencia, queda oculta por la superficialidad del condicionamiento social, del modelo cultural en el que fuimos educados e insertados. Así, usted no sabe de la posibilidad de ir más allá de esa superficialidad. ¡Usted se casa cinco veces para encontrar un amor! Si llega a vivir más tiempo, ¡usted se casa dos o tres veces más! En esta superficialidad, la promesa es que usted va a encontrar algo ahí afuera, ¡pero no lo encuentra nunca! Esa “cosa” prometida es el amor, la paz, la felicidad, siempre en el lado de afuera.

La cuestión es: ¿quién es usted? Usted no se pregunta eso, porque ya da por sentado quién es usted. Usted cree ser lo que la sociedad, el mundo y la cultura dicen que usted es. Así, usted puede llegar solamente adonde la sociedad, la cultura, dicen que usted puede llegar. En realidad, la sociedad dice que usted tiene que ir a algún lugar y, de esta forma, usted intenta ir al lugar que se le indica. Pero cuanto más usted camina, más se aleja de Sí mismo. Esto es porque, cuando usted no se conoce, cuando su conocimiento sobre sí mismo es apenas con base en lo que el pensamiento dice, usted continúa ajeno, alienado de la Verdad de quién, en realidad, es Usted.

Dentro de cada uno hay esa ansia por algo más grande que esa vida común. Aquí estamos ante algo que no se puede forzar en el otro. Hablo de esa tremenda ansia por el autodescubrimiento, y esto es algo que viene por la investigación, cuando usted sale del pensamiento tradicional y se orienta a investigar sobre sí mismo, para preguntarse qué es eso, quién es usted. Eso no ocurre porque otro le dice que se pregunte quién es usted, es algo que surge dentro de usted. Usted debe ser como un científico: curioso. Pero su laboratorio no es externo, es interno. Usted debe investigar, exactamente como un científico, sobre su vida y, aquí, el laboratorio es su propia vida.

De esta forma, es posible Despertar a la Verdad sobre Sí mismo. Cuando esta Verdad está presente, no hay más confusión, hay una completa rendición a esa Percepción, y eso es fundamental. Eso es algo que depende de cómo usted comprende la cuestión de cuánto el sufrimiento es algo absurdo en su vida, o cuánto es estúpido vivir en sufrimiento. Es por eso que ese Despertar no es para la mayoría, pues aún están durmiendo en cuanto a ese respecto, no tienen ningún interés. Es una especie de estado de conformidad y todos son unánimes en aceptar ese modelo.

Cuando yo era niño, lo más importante para mí eran aquellos momentos en que podía quedar desconfiado de que había algo que no encajaba. Era en esos momentos que sentía la falta de una totalidad, de una integridad. Mi vida fue así, en medio de oraciones para que Dios se revelara, porque se me enseñó, cuando niño, que Dios era real, que Él era la respuesta a cualquier aflicción y confusión humana. Entonces, había esa búsqueda. Cuando yo tenía 24 años, algo sucedió: hubo la aparición de la Presencia de mi Maestro, mi Gurú. Eso produjo dinamismo para yo explorar más profundamente lo que había de errado, lo que estaba faltando aquí.

Usted necesita tener una cierta madurez y, cuando esta está presente, usted es atraído para la Verdad, por la Verdad, para ese encuentro que necesita tener Consigo mismo, con Aquello que usted trae ahí dentro. Por eso, nadie puede, y nadie necesita, enseñarle algo sobre Eso, porque ya está ahí. Es como un niño que, cuando sale del útero, ya sale buscando su experiencia más vital: el pecho de la madre para mamar. Nadie necesita enseñarle eso al niño. En el hombre hay un anhelo por la Verdad y, cuando este está en esa madurez, ese anhelo crece de una forma tan grande que no soporta más vivir sin esa Realidad; es cuando el bebé va a buscar el pecho de la madre para poder alimentarse.

Ese es el anhelo que usted tiene, ahí dentro, por la Verdad. Usted puede darle a Eso cualquier nombre: Verdad, Dios, Presencia, Consciencia, ¡porque Eso realmente no tiene nombre! Es “algo” que está más allá de esa vida mediocre. Algunos se orientan hacia eso más temprano, otros más tarde, pero usted tendrá que hacerlo en algún momento, porque no se puede vivir lejos del “seno de la madre”. Usted no tiene cómo “nutrirse”, “alimentarse”, es decir, ¡no tiene cómo continuar teniendo una vida sin Eso!

No hay posibilidad de Libertad, Paz, Amor y Felicidad si no hay Vida, y no hay Vida sin la Verdad. Esa “enseñanza” no se enseña, porque Eso no es enseñable. Es una “enseñanza” que apunta para Lo que no puede enseñarse. ¡Es una cuestión de Despertar! Entonces, usted se vuelve más conciente, más y más conciente, y va más allá de la mente egoica, del sentido de un “yo” separado; más allá de esas cuestiones del “sueño”: las cuestiones sociales, económicas, filosóficas, espirituales, políticas… Usted está más allá de eso, de la ilusión de haber nacido como brasileño, americano o alemán, más allá de esa noción de ser una persona con una herencia genética y cultural. Usted Despierta y, entonces, ¡es un Sabio! Esa es la Naturaleza de Dios, de la Verdad, de la Consciencia, de la Realidad.

¿No es eso? Si no es eso, usted queda preso a esas cuestiones de justicia, injusticia, en el campo de la ética, de la moral, de la política, de la religión, en el terreno de la cultura. Estoy hablando del Descubrimiento de la Felicidad, del Descubrimiento de su Divina y Esencial Naturaleza, de Aquello que otros, antes que usted, descubrieron un día, y también hablaron de esa “puerta”. Esta no es una puerta cerrada, ¡es una puerta abierta! Es solo como si estuviera oculta de la gran masa, porque la mayoría no tienen interés en investigar eso, aún no tienen madurez para eso.

Esos antiguos patrones son los modelos que usted hereda de la sociedad, del mundo a su alrededor, en que todos, absolutamente todos, están presos a esa dualidad entre lo cierto y lo errado, lo justo y lo injusto… Así, usted tiene cuestiones al respecto de quién debe ganar la copa del mundo, quién debe ser el próximo presidente, quién debe resolver las cuestiones en esa o aquella área… Usted queda preso a eso, como si eso fuera su realidad, pero es solamente el “sueño” que el pensamiento construye sobre el mundo a su alrededor, que, en realidad, no está a su alrededor, está solamente dentro de su cabeza. Pero nadie nunca le informó nada acerca de eso, incluso porque usted no tenía interés en oír nada de eso. Ahora, usted se está inclinando a preguntarse “¿quién soy yo?”, que es algo nuevo, un momento nuevo. Así, usted se hace más y más presente para saber quién es Usted. Mi Maestro me mostró Eso.

Usted necesita descubrir que el sufrimiento es una idea basada en el pensamiento, en la creencia de ese falso “yo”. Usted está muy apegado a esa supuesta identidad, que usted cree ser, y ahí está lo que sustenta toda la ilusión de su vida, todos los problemas que usted ya tuvo y tendrá en la vida (que tuvo porque estaba “durmiendo” y que tendrá solamente si no “despierta”).

Esa falsa identificación con el cuerpo y la mente es su problema. Cuando usted tiene esa Comprensión, eso se vuelve una nueva y real dirección para su Vida, porque ahora Esta es Real, no es más la vida dada por sociedad, por la cultura, por el mundo, por los padres, por los políticos, por las ideologías y creencias, todas ellas basadas en el concepto de la dualidad (lo que es y lo que no es; cierto y errado; verdadero y falso; bueno y malo). Usted no es un concepto ni una creencia, es algo más grande que todo eso. ¡Usted es Dios! ¡Usted es esa Presencia, esa Realidad!

Esa es la constatación cuando usted entra por esa “puerta” que, hasta entonces, parecía no existir o estar oculta. Por eso Jesús Cristo un día dijo: “Yo soy la puerta”. ¡Él estaba hablando de esa “puerta”! Él se refería a Cristo, que es su Realidad interna. Cuando él decía “Yo Soy”, estaba hablando de ese “Yo Soy” que es Usted, de esa misma Realidad, porque hay solamente una Realidad en toda la manifestación, que es ese “Yo Soy”… “Yo Soy la Puerta”. Entonces, yo lo supe… Yo me conocí a Mí mismo aconteciendo en ese momento, no como un concepto, sino como un Ser sin localización.

¿Usted entiende esto? La Constatación de la Verdad sobre Eso que Usted es, es la Comprensión de la no localización, de la inexistencia de tiempo y espacio. Usted es la propia Realidad de Cristo, de Dios, de la Verdad. No es la Realidad solamente de Jiddu Krishnamurti, Eckhart Tolle, Ramana Maharshi, Buda y Jesús de Nazaret; ¡Es su Realidad! ¡Es Usted! Eso no es una creencia, un nombre, una forma o una historia.

Cuando usted tiene la Verdad presente, esa autoimagen se disuelve, la historia de autoimportancia cae, y todo es acogido en esa única Realidad que Usted es, en esa Consciencia, que es Dios. Así, no hay más acepción de personas, porque no hay más “personas”. No hay más miedo de personas, ¡porque no hay más “persona” en ningún lugar! No hay más frustración, decepción ni encanto con lo externo. Entonces, nadie le va a dar más Amor que El que Usted es aquí y ahora, porque nada de Eso viene ni vendrá de afuera. ¡No hay nada allá afuera!

¿Quién le ha dicho que hay algo allá afuera? ¡No hay nada allá afuera! Entonces, la Felicidad no vendrá por cambiar su coche por un modelo 2019. Usted no necesita un coche, una casa más grande o un apartamento nuevo, ni una novia nueva, un matrimonio nuevo, o más hijos… ¡Usted no necesita más! ¡Mi Maestro me mostró eso! Entonces, todo, absolutamente todo, fue percibido de una forma nueva. Un cambio completo está presente en esa Constatación de la Verdad sobre Lo que es Usted.

*Transcrito a partir de un discurso en la noche del 01 de junio de 2018, en un encuentro online. Publicado en portugués por primera vez el 01 de enero de 2020. Para más informaciones sobre como participar, haga clic aquí.